23 de marzo de 1919:
1) Convocatoria de una asamblea constituyente nacional. 2) Proclamación de la República italiana. Descentralización y autonomías. Soberanía popular ejercida mediante el sufragio universal e igualdad de derechos para los ciudadanos de ambos sexos. Extirpación de la burocracia irresponsable y reorganización de la administración estatal partiendo de cero. 3) Abolición del Senado y de la policía política; creación de una guardia cívica. 4) Abolición de todos los títulos de casta, manteniendo únicamente los de honor y nobleza del ingenio y los derivados de la honradez en el trabajo. 5) Abolición del servicio militar obligatorio, desarme general y prohibición de fabricar ingenios bélicos en todo el país. 6) Libertad de pensamiento y de conciencia, de religión, asociación, prensa, propaganda, agitación individual y colectiva… 9) Disolución de las sociedades anónimas, industrias financieras, supresión de todo tipo de especulación de la banca y la bolsa. 10) Censo y reducción de las riquezas personales. Confiscación de las rentas improductivas. Pago de la deuda del antiguo Estado por parte de quienes tuvieran bienes de fortuna. 11) Prohibición del trabajo de los menores de 16 años. Jornada laboral de ocho horas con base legal. Destierro de los parásitos que no sean útiles para la sociedad. 12) Participación directa de los ciudadanos útiles en todos los elementos del trabajo. La tierra para los campesinos. Las industrias, transportes y servicios públicos serán gestionadas por sindicatos de técnicos y obreros. Eliminación de toda forma de especulación personal. 13) Abolición de la diplomacia secreta. 14) Política internacional inspirada en la solidaridad de los pueblos.